mayo 22, 2025

Revista V+65

El magacine para +65

Tres hábitos naturales que refuerzan el sistema inmunológico en invierno

El invierno puede ser una época difícil para nuestro sistema inmunológico, especialmente a partir de los 65 años, cuando las defensas naturales del cuerpo pueden debilitarse. El frío, los virus estacionales y la menor exposición al sol hacen que sea fundamental adoptar hábitos saludables para fortalecer nuestras defensas. A continuación, encontrarás tres hábitos que además de la alimentación saludable, reforzarán tu sistema inmunológico en invierno.

1. Mantente hidratado

Con el frío, solemos olvidar beber suficiente agua, pero la hidratación es crucial para el buen funcionamiento del sistema inmunológico y defencernos de los resfriados. Toma al menos 1,5 litros de líquidos al día, incluyendo infusiones como el té verde, menta o la manzanilla, que tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.

2. Exposición al sol y vitamina D

La vitamina D es esencial para el sistema inmunológico y en invierno podemos tener deficiencia por la menor exposición solar. Para evitarlo:

  • Pasa al menos 15-20 minutos al día al aire libre en las horas más soleadas.
  • Incluye en tu dieta alimentos ricos en vitamina D como pescados grasos (salmón, sardinas), lácteos fortificados y huevos.
  • Consulta con tu médico si necesitas un suplemento de vitamina D.

3. Duerme bien y evita el estrés

El sueño es el momento en que el cuerpo se regenera y fortalece sus defensas. Para un descanso reparador:

  • Mantén horarios regulares de sueño.
  • Evita pantallas antes de acostarte.
  • Crea un ambiente cómodo y oscuro en tu habitación.

Dormir entre 7 y 9 horas diarias ayuda a reducir el riesgo de infecciones y mejora la respuesta inmunitaria.

Y por otro lado, el estrés crónico debilita el sistema inmunológico. Para combatirlo:

  • Practica la meditación o la respiración profunda.
  • Mantente en contacto con amigos y familiares.
  • Disfruta de actividades placenteras como la lectura, la música o las manualidades.

Y por supuesto, una alimentación variada y saludable junto con alguna actividad de ejercicio físico para cuidadarse tanto por dentro como por fuera.

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