
El otoño nos regala uno de los frutos más ricos y versátiles de la temporada: el higo. Y con él podemos preparar una receta tan sencilla como deliciosa: tostas de higos frescos con ricotta, miel y nueces. Es perfecta para un desayuno especial, una merienda o incluso una cena ligera acompañada de una ensalada. Y lo mejor, se prepara en menos de 10 minutos.
Ingredientes (para 4 tostas)
- 4 rebanadas de pan integral o de centeno (mejor si lo tuestas un poco)
- 150 g de queso ricotta o requesón suave
- 8 higos frescos maduros
- 2 cucharadas de miel
- 6-8 nueces troceadas
- Un chorrito de aceite de oliva virgen extra
Preparación paso a paso
- Tuesta el pan ligeramente para que quede crujiente por fuera y suave por dentro.
- Unta el queso ricotta generosamente sobre cada rebanada.
- Lava y corta los higos en rodajas finas y colócalas encima del queso.
- Riega con miel por encima de los higos, dejando que caigan unos hilos dorados.
- Añade las nueces troceadas, que darán ese punto crujiente y saciante.
- Termina con un toque de aceite de oliva virgen extra y, si te apetece, unas hojitas de menta.
Si no tienes higos frescos, puedes sustituirlos por pera en láminas finas o por uvas partidas a la mitad.
Y si prefieres un sabor más intenso, prueba a usar queso de cabra cremoso en lugar de ricotta.
¿Qué nos aporta esta receta?
Esta receta no solo es sabrosa: también es muy nutritiva y equilibrada.
- Los higos aportan fibra y antioxidantes naturales, ayudan al tránsito intestinal y favorecen una buena digestión. Son además una buena fuente de magnesio y calcio.
- El queso ricotta ofrece proteínas de fácil asimilación y calcio, importante para mantener los huesos fuertes.
- Las nueces son ricas en ácidos grasos omega-3 y mejoran la memoria y la salud cardiovascular.
- La miel endulza de forma natural y tiene propiedades antibacterianas.
- El pan integral aporta energía lenta, ideal para mantenernos activos durante el día.
Una receta perfecta para cuidarse con placer, disfrutar del otoño y dar un toque gourmet a cualquier día.