El verano ya está aquí y nos esperan días de mucha exposición al sol, a la brisa del mar, a la polución, y como bien nos enseña la experiencia de años anteriores… nuestra piel se resiente!
Pero como siempre es mejor que prevenir que curar, esto tiene solución y podemos preparar nuestra piel para pasar un verano todoterreno y llegar a septiembre con una piel no solo impoluta, sino con un tono de lo más saludable. Vamos a ver a continuación como podemos conseguirlo con estos 5 consejos:
- Hidratación, nada más fácil y económico para mantener nuestra piel jugosa y agradecida. Prepara tu botella de agua por la mañana y toma al día 1,5 o 2 litros (sin excusas), puedes añadir limón, o aprovecha cuando vayas a tomar algo a pedir alguna infusión con hielo (todo suma!).
- Cremas hidratantes y nutritivas, ahora más que nunca no tengas excusa en utilizar estas dos cremas cada día, muchas personas utilizan solo una crema hidratante en la mañana y no aplican la de la noche. En verano recuerda hidratar por la mañana y «nutri-hidratar» también en la noche antes de acostarte y después de limpiar el rostro de las impurezas del día.
- Protección, si vas a la playa utiliza cremas que eviten las manchas solares de forma uniforme, con factor de protección. Busca que sea una crema hidratante y rica en nutrientes.
- Jugos extrahidratantes, ¿sabías que hay jugos de frutas que tienen mayor potencial para nutrir a la par que hidratar desde dentro? prepara jugos naturales dando preferencia a frutas como el kiwi, fresas y también tomate o remolacha, también de frutos rojos como los arándanos muy ricos en antioxidantes son aliados extra para la piel.
- Betacarotenos. La naturaleza es sabia y nada más que hay que fijarse que al inicio del verano ya nos ofrece frutas y verduras ricas en betacarotenos que nos ayudan a proteger la piel de forma natural a la vez que nos aportan un delicado tono bronceado. Así encontramos albaricoques, melocotones, nectarinas, papaya, zanahorias.
Y recuerda aprovechar todo lo que puedas los días de verano al aire libre, para cargarte bien de vitamina D para cuando lleguen los días más fríos del invierno.